¡No nos hace falta ver un animal para saber que está! Esto pasa con el jabalí, el corzo y muchos otros. Incluso podemos saber que ha habido una pelea entre dos especies de ave sin haberla escuchado. Se trata de tener los ojos bien abiertos y saber leer las pistas que nos dejan. El taller de rasros nos abrirá los sentidos a los secretos de la naturaleza.
Siguiendo un corto itinerario dentro del bosque, los alumnos encontrarán los rastros que les explicarán todo lo que pasa cuando las personas no estamos.
Funcionamiento del taller de rastros «Sígueme la pista»
Cada alumno recibe una foto de un animal. Entre todos los participantes se identifican los animales de las fotos.
El educador presentará el material que acompaña el taller de rastros. Entre este material se encuentran:
- Cuernos
- Plumas
- Egagrópilas
- Huellas
Los participantes relacionan qué rastro pertenece a qué animal y se introduce el concepto de presa, depredador y carroñero.
Posteriormente el grupo irá paseando por el bosque y encontrará los rastros de los animales salvajes que han identificado previamente. El educador guiará a los alumnos para interpretar correctamente los hechos que han sucedido en el lugar donde se encuentra cada rastro.
Valor educativo
Los alumnos se sensibilizarán en la omnipresencia de la fauna silvestre de nuestro entorno. A menudo el ruido que hacemos aleja a los animales: paseamos por el bosque y no vemos ninguno. El taller de rastros «Sígueme la pista» abrirá los ojos de los jóvenes al mundo de los animales que comparten el medio natural con nosotros.
Además, los niños y niñas de primaria entenderán el concepto de red trófica, que muy a menudo perciben como un esquema dificil de captar.
La Historia de Pau
El otro día recibí una llamada de una madre. Se quejaba de que su hijo. Después de la visita al Zoo de los Pirineos, Pau se entusiasmó por la naturaleza. Pidió un libro sobre cómo seguir los rastros de los animales y lo estudió drante unos días.
Ahora cada finnde semana pide que su familia explore el entorno de su ciudad en bisca de piñas roídas por ratones, plumas y otras señales que dejan los animales.
Se notaba que la madre estaba sonriendo mientras explicaba que cuando pasean por el bosque Pau les pide que no hagan ningún ruído para no asustar a los animales. Han dedicado un espacio de su casa para los pequeños tesoros que encuentran durante las excursiones.
Por tanto he de advertir que la excursión escolar al Zoo de los Pirineos puede cambiar los intereses de vuestro hijo o hija. El efecto los puede separar por un momento de la pantalla y como consecuencia puede requerir más tiempo por parte de los padres. Eso si, sólo si quieren apoyar a sus hijos en sus nuevos intereses y pasar tiempo de calidad con ellos.
Oferta educativa completa para educación primaria
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Consultad Información general para aclarar todas las dudas.
El taller de rastros para primaria
es una actividad complementaria muy recomendable.
Trabaja la temática de la biodiversidad
desde un punto de vista diferente y enseña a los alumnos
el respeto hacia la vida salvaje. Nos envuelve,
aunque no siempre la podemos ver.
Además, el taller da una excelente oportunidad para
repasar el conocimiento adquirido a lo largo de otras actividades en el parque.
